2010-02-24-Intención
Lightline LLN#249
Contenido
1Cabecera
1Tema: Intención
2Grupo: Lightline TeaM
2Facilitadores
1Maestro: Ajustador del Pensamiento
2TR: Henry Z.
3Sesión
1Operación
2Lección
2.1Intención
2.2Mente
2.3Estabilidad
2.4La gracia
3Cierre
Tema: Intención
Grupo: Lightline TeaM
Facilitadores
Maestro: Ajustador del Pensamiento
TR: Henry Z.
Sesión.
Opeining.
Oración. Padre, conéctenos en este momento del eterno ahora, ese espacio infinito entre nuestra mente y tu presencia. Conéctenos en un intento de reunirnos dentro de este espacio del alma, este espacio donde somos verdaderamente conscientes, humildes, compasivos y deseosos de aprender un poco más de tu voluntad.
Lección.
Intención.
Voz interior. Saludos a ustedes esta noche, yo soy la Voz Interior y vengo a ustedes desde la mente infinita en este momento para compartir en un entendimiento siempre creciente entre la mente humana y la conciencia divina. La última vez, discutimos la manifestación. Discutimos algunas cosas sobre la manifestación y hoy continuaremos en una línea similar discutiendo la intención. Cuando la primacía del Padre calificó un aspecto de sí mismo para eventuar los mundos del tiempo y el espacio en una expresión incompleta, la intención en la mente de Dios era que el conjunto de la expresión encontrara la plenitud en la presencia, los aspectos y la voluntad de la Deidad. La intención de Dios era tal que estaba diseñada para crear un animal consciente, dotarlo de un aspecto divino, darle todo lo que necesitaba para sobrevivir, crecer, prosperar, encontrar el aspecto divino en su interior y, al encontrar el aspecto divino, comenzar lentamente a comprender la voluntad y la intención de este aspecto divino.
De esta manera, los hombres serían capaces de encontrar la plenitud, la totalidad en la vida, y crecer gradualmente de vida en vida en un aspecto complementario a la Presencia Divina Interna, fusionarse con este aspecto de la Presencia Divina, y gradualmente gravitar hacia el hogar experimentando todo lo que hay en la presente realidad de tiempo y espacio. Esta es la intención de Dios. Deben discernir qué es lo que pretenden para su vida, su vida personal, sus relaciones y el fenómeno social de sus hermanos y hermanas. En los mundos del tiempo y del espacio, especialmente en el mundo en el que ustedes viven, hay una tremenda distracción, una competitividad por su atención, sin embargo, la conciencia de su naturaleza espiritual exige la responsabilidad de ir hacia adentro en un esfuerzo cada vez mayor por comprender quiénes son, qué están haciendo aquí y cuál es su responsabilidad en relación con estas cuestiones.
La intención es similar a la de un artista que tiene una idea para crear un objeto. Manipula el material de una manera determinada para revelar la naturaleza de algo que va más allá del mero material utilizado para expresar la idea y la intención. La intención es como el proceso, un escultor que trabaja con un trozo de piedra puede realmente ver la forma dentro de la piedra y diligentemente desmenuza el exceso de piedra revelando una cualidad dentro de la piedra que no era inmediatamente inherente a la naturaleza cruda de la piedra. Esta misma opción se aplica a la propia vida. Uno puede tomar la vida y vivirla sin experimentar nunca plenamente el misterio sublime, la satisfacción completa, el desafío definitivo, la posibilidad de la felicidad. Es posible limitarse a reaccionar ante la vida, a saciar sus deseos, a utilizar todo lo que pueda para su propio placer, su propia necesidad, y no preocuparse realmente por la conciencia de las necesidades de los demás.
Por otra parte, un tonto así ni siquiera es consciente de sus propias necesidades reales. Sólo está ganando tiempo. Una verdadera intención comienza a formarse a partir de la conciencia de la experiencia. Se pueden cometer errores o no. Digamos que sí que se cometen errores. Se cuenta el costo de los errores y se hacen conscientes de las maneras de evitar cometer esos mismos errores. Una vez que se vuelven conscientes es como estar en un río circular. No importa a dónde se vaya en este círculo, eventualmente se detendrá en la orilla del río y al volver a entrar en el río se detendrá en algún otro lugar y esto continuará hasta que haya experimentado todo lo que es necesario para llevarle a una mayor conciencia y conocimiento a medida que avanza por este río de la vida.
La Mente.
Inherente al patrón de la vida está el principio educativo de que lo que no se está dispuesto a aprender por sí mismo, la vida está más que dispuesta a acomodarlo y mostrarle lo que necesita aprender. Las lecciones de la vida ajustan nuestra intención. Nos ayudan a centrarnos de forma más consistente en lo que es pertinente y responsable en la vida de uno. La humanidad nace en una naturaleza animal; es la parte humana e incompleta del hombre. Es obvio que el hombre reaccionará a ella, el hombre responderá a ella. Pero a medida que se empieza a cuestionar y a ver lo que no se dice dentro de la naturaleza, se empieza a entender un diseño y un patrón mayor en el trabajo, se empieza a entender la inteligencia, se empieza a sentir que hay algo más grande dentro de uno que lo que muestra la mente. Ustedes se dan cuenta de que dentro de su mente hay un aspecto de perfección. Pueden ver, en cierto sentido, si tuvieran el control, cómo podrían hacer que las cosas fueran.
Eventualmente, esto lleva e indica que hay un aspecto de perfección dentro de la mente humana y no está necesariamente ahí para que controlen lo externo tanto como para que comiencen a comprender y controlar la naturaleza interna de su mente, de su pensamiento. El fenómeno humano siempre ha buscado la calidad. La calidad para un ser humano primitivo es mucha comida, calor, un lugar para vivir, medios para protegerse. La calidad para un ser humano civilizado avanzado es un aspecto de cómo vive y los objetos que le permitieron hacer su vida más agradable. Cuando el hombre empieza a apoyarse en los conocimientos de las generaciones precedentes y no asegura la cualidad interior de la conciencia para motivarlo y dirigirlo, es posible que los hombres acaben en una sociedad similar a la que existe en su tiempo actual, donde la naturaleza externa de la vida ha superado a la naturaleza interna y no se han desarrollado de la mano.
Es inútil buscar algo a lo que culpar por la falta de conocimiento personal, de respeto personal y de responsabilidad a los pensamientos altruistas que se dan dentro de la mente humana, porque todas las mentes habitadas por un aspecto de Dios son mentes que están constantemente bombardeadas por pensamientos que no son de la propia mente. Es una elección. Es posible ignorar totalmente la mayor parte de lo que la mente está diciendo, para sólo escuchar cómo el ego necesita ser saciado. Por lo tanto, la intención, la intención es el hilo continuo, es lo que conecta y refuerza la experiencia, las tareas que se realizan, y las cualidades que existen en la mente que está tratando de llevar a cabo en su vida.
Por eso es importante la religión revelada, la revelación trae a la conciencia realidades específicas, verdades que cuando la mente está preparada puede utilizar esta revelación como herramienta para completar el trabajo que la revelación inicia. Pronto se aprende a tener fe. Pronto se aprende a controlar el miedo animal hasta la cautela. Se empieza a confiar en la guía invisible y poco a poco y lentamente se empiezan a notar aspectos de la vida que indican cómo se mantiene la calidad del espacio dentro de la mente. Las cosas de las que hablo no son mágicas, no son fáciles, no las van a encontrar en un paquete a la venta, pero son aspectos de la realidad que la mente capta como un andamiaje que utiliza para revelar la intención, la intención que complementa la Voluntad del Padre.
Cada vez más en un mundo de estatus Agondonter es un reto, ver con los ojos de la mente, sentir y percibir con el tacto de la mente, comprender a través del consejo colectivo con otras mentes, cada vez más responsabilizarse de su propio comportamiento. A medida que se empieza a emprender y a recorrer un camino espiritual, las recompensas comienzan a revelarse sutilmente, a veces de forma dramática, pero en su mayor parte de forma gradual y sutil, que se empieza a ver la necesidad de mantenerse fiel a una intención mayor cuya fuente no es externa, cuya fuente surge de la conciencia humana del elemento divino interior. La intención es el lenguaje del alma. Este lenguaje utiliza imágenes, sentimientos, conocimientos, y prevé el futuro en el sentido de que lleva un aspecto del presente ahora al siguiente presente ahora y su continuidad en el futuro.
La Quietud.
El aquietamiento de la mente, la contemplación, comienza a revelar las tareas que tenemos entre manos. No son tan complicadas que no se puedan entender; no son un misterio. Todo lo que se necesita y hay que hacer está muy cerca de ustedes, están en medio de ello. El mayor esfuerzo por mantener esta intención para toda la vida como propia comienza a manifestarse en la vida. Comienza a afectar a otros, a otras mentes en un nivel subconsciente. Es algo que otra mente detecta, siente. Esta persona se siente bien. La gente que se siente socialmente bien y se siente fuerte comienza a crear un aspecto de mayor conciencia dentro de la sociedad. La sociedad comienza a anhelar adorar verdaderamente al Padre. Todos comienzan a beneficiarse a través de la intención.
En cierto sentido, la intención es similar a la agenda, excepto que actualmente en su sociedad, la agenda ha llegado a reflejar algo del egoísmo personal egocéntrico, por lo que no siempre es tremendamente positivo. Sin embargo, en lo que respecta al Padre, Su agenda es cierta. Sean ustedes perfectos como Yo soy perfecto. La afirmación primordial establecida como una agenda e intención para la humanidad. Más allá de ustedes y más allá de la vida en esta tierra, es la cualidad de la experiencia divina que expresa a las miríadas de personalidades que no están habitadas por la presencia divina. Les expresa la realidad de la presencia divina, que su trabajo y su esfuerzo no son en vano, que ellos también empiezan a ver resultados. Todos quieren resultados, pero no todos quieren asumir la responsabilidad de engendrar esos resultados. Por lo tanto, es a la mente preparada con un esfuerzo inteligente, un sentido de urgencia y belleza al que se le revela más y más.
Cuando se empieza a honrar lo que se ha aprendido y ganado en la vida, se empieza a recibir una mayor conciencia y sentido de la dirección en la que todo este aprendizaje los está guiando. Cuando se convierte en algo fijo y seguro dentro de su mente es cuando se ha embarcado realmente en llegar a ser perfecto, incluso como el Padre en el cielo es perfecto. Finalmente, sin el Padre, todas las cosas se quedan cortas, los sueños, la intención, las necesidades, los deseos. Toda la vida está diseñada para acomodar al Padre, la guía interior, la conciencia que se presenta dentro de su mente, el aspecto de calidad que se le revela. Y como dijo el Maestro: “Entre ustedes, el que quiera ser el más grande, que sea el primero en servir”, porque es realmente en el ámbito del servicio donde reside la mayor esencia de la realidad. No se encuentra en los patrones de pensamiento extático, ya que éstos están destinados a estimularlos y motivarlos. La verdadera esencia de la realidad se encuentra en la dureza de la vida, en el desafío de la vida, en la idea de que poco a poco se puede ayudar a mejorar a otra persona.
La Gracia.
Esta es la historia del Buda de la compasión. Un día el Buda va a Dios y le dice: hay mucho que hacer aquí, hay tanta necesidad y yo sólo tengo dos manos. Dios dijo, nosotros nos encargaremos de eso, así que rompió al Buda en pedazos y lo reconstruyó con cuatro manos. Después de un tiempo Buda vuelve a Dios y dice, hay tanta necesidad, no hay suficiente tiempo, no tengo ayudantes y todo lo que tengo son cuatro manos. De nuevo, Dios desmonta a Buda y lo rehace con seis manos. La historia antigua llega al punto en que Dios ha creado al Buda de los mil brazos. En este punto, Dios no está exigiendo más de lo que se puede realizar. Sólo pretende que actúen de acuerdo con su capacidad. Ir más allá de su capacidad como humano es sumergirse en lo divino.
Cierre.
Les agradezco su paciencia y diligencia al escuchar mis palabras esta noche. Les deseo a todos una semana bendecida, buenas intenciones, paz y felicidad. Hasta la próxima vez, que mi amor los envuelva, que mi amor los empodere para llenarse de amor a sí mismos y para amar a los demás. Gracias por esta noche.
